Ya habiendo terminado la primera parte del Quijote ahora nos adentramos en la verídica segunda parte realizada el año 1615. Desde la publicación de la primera parte hasta la segunda como vemos desde el principio han pasado los años, los meses, los días y las horas para el autor. Aún así no ha pasado ni un solo minuto en la narración.
Sencillamente empieza cómo si fuera un capítulo más de la primera parte con continuidad y sin haber un período de tiempo entre libro y libro.
El tiempo es relativo.
1 comentario:
Y tan relativo...¿quié no ha experimentado que el tiempo es eterno en medio de uina clase aburridísima?
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