El vino es por exelencia el milenario compañero del hombre. En su nombre se han realizado pregarias y ceremonias, se han escrito odas y sonetos. Su ingesta ha despertado la creatividad y su presencia es protagonista de no pocas obras literarias. El Quijote por supuesto es una de ellas.
El vino es sangre, la sangre es vino. Ahora solo se debe hacer fluir la imaginación para imaginar que el vino es la sangre de un gigante que oprime el reino de la princesa Micomicona y así habiendolo matado uno queda libre de promesas.
1 comentario:
Sí, el vino es cultura y en el Quijote se defiende su condición de compañero inseparable del ser humano civilizado.
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